
Hace días, un muy cualificado dirigente de la Dirección provincial de mi Partido ha realizado unas declaraciones a la prensa considerando que los resultados electorales en Málaga ha sido un “auténtico dique contra la derecha”. Igualmente el máximo líder de la misma Dirección ha manifestado que tras estas últimas elecciones “se encuentra mas fuerte que nunca”. No se refiere a la Dirección del Partido sino él. Simplemente él.
Creía que ya estábamos acostumbrados a manifestaciones y estimaciones lejanas, en mi criterio, a la realidad política actual de nuestra provincia. Pensaba que deberíamos estar ya vacunados a tales absurdos planteamientos pero no deja todavía de sorprendernos tales valoraciones totalmente subjetivas y faltas totales de crítica a la situación política del PSOE malagueño. Ya en las elecciones Municipales y Generales se habló de la crisis económica ante el descalabro general electoral de nuestro Partido, responsabilizándola de la bajada electoral más importante de nuestra reciente historia. El haber achacado, entonces, a la crisis esa bajada electoral debería haber sumido en la tristeza y en la melancolía a nuestros dirigentes. Pero no. Se mantuvieron en una euforia electoral determinada ya que la responsabilidad no era de ellos. Era de la crisis. Ahora que el PSOE corrobora y asume ser la segunda fuerza política de nuestra provincia, muy por debajo del PP, siendo nuestra provincia donde nuestro Partido ha obtenido un apoyo electoral al nivel de Almería y Cádiz, ambas con graves problemas internos y muy lejos de Sevilla y Jaén donde hemos mejorado ostensiblemente en relación a anteriores comicios, sería necesario una valoración mas realista y objetiva.
Siempre es bueno ser optimista y ver siempre el vaso medio lleno en vez de medio vacío. Yo, personalmente, presumo de ello. Pero esas valoraciones con tal nefasta ausencia de crítica, hace que por parte de nuestros adversarios políticos se nos tome como unos auténticos fantasmas que no están en la realidad, por parte de los medios de difusión objetivos se sonríen de dichas manifestaciones no dándole valor y tocando a nuestra credibilidad y para los que estamos militando en esta Organización nos da simplemente pena.
Los resultados son los que son. Ni más ni menos. Con una campaña que se inicia en un bar de copas con una muy mas que discutible puesta en escena, un cierre de campaña inexistente y una lista de la que habría mucho de la que hablar, esperábamos lo peor. Pero, por lo menos, los resultados de Sevilla, Jaén y Huelva nos han servido para mantener el tipo, salvar los muebles y mantener el Gobierno con el posible apoyo de IU. Eso nos ha hecho darnos la alegría de mantener un Gobierno de izquierdas en Andalucía y parar la tormenta conservadora que nos atiza. Pero eso de ponerse satisfechos, orgullosos y fuertes muestran una ausencia total de espíritu critico y una incapacidad absoluta de hacer de este Partido, en el futuro, un Partido ganador y referente político cara a los ciudadanos de nuestra provincia en la finalidad de resolver sus múltiples problemas.
Pedro Villagrán
30.03.12
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