Desde que se inició los prolegómenos del Congreso Federal iniciamos a dar un mensaje de que antes de hablar de personas había que hablar de ideas y después personas para llevar esas ideas a buen puerto. Pasados los congresos provinciales y escogidos los delegados al Federal tenemos que poner encima de la mesa claramente nuestras preferencias.
Desde que se convocó el Congreso y Alfredo y Carme decidieron presentarse yo, personalmente, y un grupo de compañeros, pensamos que la mejor opción era Rubalcaba. Y así lo dijimos. Y lo era porque en él veíamos la experiencia la solidez de un líder que tiene todo el respeto político de la Organización por su larga militancia, por haber estado con Felipe de ministro (y de Educación!!!), haber casi terminado con el terrorismo y haberse presentado (tenía tela el asunto) en las últimas elecciones… total que tiene una serie de méritos que le avalan para coger el toro por los cuernos e intentar arreglar este Partido en la situación en la que está. Y no es que no considere a Carme una compañera extraordinaria sino que estimo que debería esperar un poco para intentar resolver problemas tan gordos como los actuales.
Estamos, compañeros, en un Partido Federal. Y la Comisión Ejecutiva Federal no es una coordinadora ni nada que se le parezca de un conjunto de partidos separados que configurarían una confederación. La Comisión Ejecutiva Federal es, ni más ni menos, la Dirección de todo el Partido y es la que dirige y gobierna esta Organización. Las baronías regionales, nacidas de la institucionalización terrible que ha asolado ultimamente a nuestro Partido, tensan la cuerda para quitar poder a la Federal a favor de las periferías. Y eso es terrible. Eso es más que nocivo para el futuro funcionamiento de la Organización.
Todos sabemos que Carme milita en el PSC. Y ello, por supuesto, es un honor. Un honor. El PSC ha dado siempre muestras de solidez ideológica y de solidaridad fraternal con el PSOE porque el PSC, compañeros, es un Partido hermano del PSOE pero no es el PSOE. Es un Partido federado con el PSOE. Y ello es importante saberlo.
El otro día en Valencia Carme ante un grupo de militantes valencianos en un acto decía que si ella es elegida en Sevilla Secretaria General, no habrá ninguna injerencia de la Comisión Ejecutiva Federal en las estructuras regionales del Partido. Y eso a mí me preocupa sobremanera. Sinceramente me intranquiliza bastante porque considero que muchos de los problemas del Partido, como Organización, han venido cuando la Dirección Federal no ha ejercido su autoridad sobre los nuevos creados poderes regionales.
Por lo tanto yo me reitero en Rubalcaba. Hoy más que ayer. Hoy más convencido que hace veinte días. Ojala los delegados sepan ver este matiz tan importante que no es, ni mas ni menos, que un modelo de Partido determinado muy diferente del que hemos tenido cuando ganábamos las elecciones y teníamos un apoyo más que mayoritario en nuestro país.
Desde que se convocó el Congreso y Alfredo y Carme decidieron presentarse yo, personalmente, y un grupo de compañeros, pensamos que la mejor opción era Rubalcaba. Y así lo dijimos. Y lo era porque en él veíamos la experiencia la solidez de un líder que tiene todo el respeto político de la Organización por su larga militancia, por haber estado con Felipe de ministro (y de Educación!!!), haber casi terminado con el terrorismo y haberse presentado (tenía tela el asunto) en las últimas elecciones… total que tiene una serie de méritos que le avalan para coger el toro por los cuernos e intentar arreglar este Partido en la situación en la que está. Y no es que no considere a Carme una compañera extraordinaria sino que estimo que debería esperar un poco para intentar resolver problemas tan gordos como los actuales.
Estamos, compañeros, en un Partido Federal. Y la Comisión Ejecutiva Federal no es una coordinadora ni nada que se le parezca de un conjunto de partidos separados que configurarían una confederación. La Comisión Ejecutiva Federal es, ni más ni menos, la Dirección de todo el Partido y es la que dirige y gobierna esta Organización. Las baronías regionales, nacidas de la institucionalización terrible que ha asolado ultimamente a nuestro Partido, tensan la cuerda para quitar poder a la Federal a favor de las periferías. Y eso es terrible. Eso es más que nocivo para el futuro funcionamiento de la Organización.
Todos sabemos que Carme milita en el PSC. Y ello, por supuesto, es un honor. Un honor. El PSC ha dado siempre muestras de solidez ideológica y de solidaridad fraternal con el PSOE porque el PSC, compañeros, es un Partido hermano del PSOE pero no es el PSOE. Es un Partido federado con el PSOE. Y ello es importante saberlo.
El otro día en Valencia Carme ante un grupo de militantes valencianos en un acto decía que si ella es elegida en Sevilla Secretaria General, no habrá ninguna injerencia de la Comisión Ejecutiva Federal en las estructuras regionales del Partido. Y eso a mí me preocupa sobremanera. Sinceramente me intranquiliza bastante porque considero que muchos de los problemas del Partido, como Organización, han venido cuando la Dirección Federal no ha ejercido su autoridad sobre los nuevos creados poderes regionales.
Por lo tanto yo me reitero en Rubalcaba. Hoy más que ayer. Hoy más convencido que hace veinte días. Ojala los delegados sepan ver este matiz tan importante que no es, ni mas ni menos, que un modelo de Partido determinado muy diferente del que hemos tenido cuando ganábamos las elecciones y teníamos un apoyo más que mayoritario en nuestro país.
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