
Lo de la Justicia va que arde. Es un auténtico escándalo y luego nos echamos las manos a la cabeza cuando en el deporte hay entradas violentas que dan mal ejemplo a los niños. Lo que da mal ejemplo es ver lo que estamos viendo. En medio de la pelotera del juez Garzón, donde estamos claramente que la Justicia, bueno los jueces, van a cargarse a otro por unas razones que no se justifican de ninguna de las maneras, en una clara cacería impresentable, viene algo más gordo. El curita Capms, el del “amiguito del alma”, el compañero de Costa, Secretario General del PP de Valencia, el de los trajes regalados, el que le pedía a su chofer dos mil euros para comprarse un traje, el que nunca usaba la tarjeta de pago electrónica, ese, Camps, ha sido considerado inocente de los hechos que se le acusaba.
No existe en este país nadie en sus justos cabales que considere a Capms inocente de lo que se le acusa. Nadie. Ni el PP. Y si el PP se lo cree que lo ponga en un cargo público lo mas pronto posible. Y si tiene capacidad de gestión con capacidad de contratar obra pública, pues mejore que mejor.
Lo de Marta de Castillo y lo de Camps son un auténtico desatino. Tenemos una justicia muy garantista, eso es verdad. Pero ya veréis como a Garzón no le acoge ese garantismo. La Justicia con la espada, la balanza y la venda en los ojos haciéndola ciega, pero en manos de estos jueces perjudican la credibilidad en el Estado de Derecho.
Y ahora el PP, con sus santos coj… decide que el Consejo General del Poder Judicial sea elegido por los propios jueces sin participación del Congreso y del Senado. Y a eso le llaman despolitizarlo, le llaman autentificarlo. ¡!!Vamos no me hagan reir …que tengo el labio partido!!! Eso es apartarlo de toda clase de control externo y ajeno y meterlo de lleno en el l corporativismo, en el clasismo y en la lejanía de los controles democráticos.
Pedro Villagrán 27.01.12
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