Málaga está en fiesta. La gente se divierte, bebe, canta y baila al son de verdiales, sevillanas y músicas de mover el cuerpo"en lo moderno". Es magnífico ver a la gente divertirse y divertirse uno tambien. A pesar de la crisis la feria está rebosante.
Acudo con un grupo de amigos y compañeros a un acto del Partido en la feria donde en la caseta de UGT entregan un premio al "liderazgo social" a Cruz Roja. Yo, que fuí durante cuatro años presidente de Cruz Roja en la provincia con Leocadio Marín de Presidente Nacional, estoy en el acto y hasta me emociono. Lo veo normal. Me siento partícipe de esa Institución en estos nuevos tiempos. No fué fácil cambiar entonces Cruz Roja de una organización militarizada y sin la mas mínima participación de los voluntarios y socios a una institución moderna y cercana a los ciudadanos.
Hablo con los compañeros. Me preguntan los los compañeros sobre mi opinión sobre las próximas elecciones municipales. Silencio mi opinión. Me la reservo. Tambien me preguintan algunos periodistas. Igualmente salgo por la tangente. No porque lo vea mal sino porque lo desconozco. Desconozco la estrategia que se va a realizar. Se habla de muchos candidatos como futuribles cabezas de lista. Cuatro, cinco, tres. ¿?
El Partido Popular gobierna el Ayuntamiento de Málaga desde hace mucho tiempo. Demasiado tiempo. La gente tiene la percepción de que no lo hace mal. Y eso, dentro de la máxima objetividad, es incierto. Su amor por lo privado, la cutrez de su política cultural, por sus deslices con el enchufismo, su aumento de impuestos, su obscurantismo en las cuentas públicas, su política de agravios con otras capitales andaluzas, su falta absoluta de lealtad institucional, su ausencia de un modelo de ciudad etc, hacen un caldo de cultivo extraordinario para demostrar, con datos, la nefasta política del PP en Málaga. Este mensaje debe hacerlo el Partido con una presencia clara y nítida en la población malagueña. En las AAVV, en las peñas, en los medios, en todo el cogollo de la población.
El tema del candidato es otro. El propio engranaje derechizado de la opinión pública (dirigida) nos lleva a solicitar una persona de buenos modales políticos, jóven, encorbatado( si ello fuese posible), bien plantado, de verbo fácil,sonriente facil y amigo de todos. Que le quite votos a la derecha que pensamos es mayoría real.
Tenemos muchas posibilidades de ganar, si las cosas las hacemos medianamente bien. Pero ¿Y si perdemos? ¿ Y si los ciudadanos no nos dan de nuevo su apoyo? Ese candidato idílico, tan bien plantado ¿se va a quedar cuatro años planteando desde la oposición nuestra alternativa política al PP?. Ello tenemos que pensarlo porque la experiencia nos dice que la lista maravillosa y ganadora en potencia se desploma cuando se pierden las elecciones.
Repito que les deseo a los compañeros toda clase de suerte en la decisión. Yo no voy a participar en ella por lo que veo en la actitud a mi alrededor, pero apoyaré, como no podría ser de otro modo la postura que se tome.
Calor, calor y mas calor en Málaga. Añoro el fresquito de Donostia. Me voy a la Feria.
Allí estaban todos los posibles candidatos. La Ejecutiva tiene esa responsabilidad que asumió en el Congreso que ganó contra otra opción diferente que seguramente haría las cosas de otra manera. Ese problema de la elección del candidato es un problema de la Comisión Ejecutiva. Vamos a ver como lo resuelve. Esperemos que sea para bien.
ResponderEliminarAntonio Carnero