UN TONGO COMO UNA CATEDRAL

En mi entrada de blog de ayer escribía mis dudas sobre el resultado del debate del lunes entre Rajoy y Rubalcaba. Lo puse en la red a las 20 horas y momentos después tuve un montón de mensajes de correo electrónicos, visitas en mi blog, comentarios etc. donde mucha gente refrendaba mi posicionamiento. En todos me contaban que habían tenido la misma sensación que yo. Que habían percibido una enorme manipulación por parte de los medios, cambiado la realidad de los resultados. Luego yo no era el único. Yo no era una excepción de los que me sentía manipulado.

Todavía me resisto a aceptar ese tema pero la realidad es verdaderamente tozuda. ¿Cómo es posible que a los cinco minutos de terminar el programa ya se tuvieran los datos cuantificados? ¿Es ello posible? Una cosa es que vivamos en la era de la rapidez de las comunicaciones y otra bien distinta es que esa velocidad sea supersónica.

Porque es evidente que los temas que se sacaron como la geografía de Cádiz y Sevilla, el dinero para los bancos y las cajas, el modelo austriaco al desempleo, el recorte de las prestaciones al desempleo del 92 y la burbuja inmobiliaria fueron en la boca de Rajoy auténticas pifias en las que demostró un desconocimiento total. Y yo pudiera comprender que en esos temas, el 80 % de los televidentes y radioyentes tengan ya una posición determinada contraria al PSOE fruto de tanta matraca y mas matraca con mas raca-raca de los medios con mentiras y más mentiras. Eso yo lo comprendo. Pero que los sesudos y maravillosos tertulianos que comen y viven de estar mas o menos informados de esos asuntos no valoren el auténtico desconocimiento de Rajoy en esos temas es como para clamar al cielo o a donde sea mas cerca. Eso es una auténtica vergüenza. Eso es un innegable despropósito.

Rubalcaba ganó el debate. Eso está más claro que el agua. Y póngase las cosas como se pongan. Y ello no lo va a cambiar unos merluzos que hablan y hablan según los medios que les de su dinerito a cambio de dar una opinión ya establecida de antemano.

Yo, por lo visto al igual que mucha gente (votantes socialistas o no), desde la objetividad mas absoluta, pienso que Rajoy hizo el ridículo, dijo muchísimas mentiras y no aclaró en absoluto las grandes lagunas que tiene su programa electoral. Y eso no lo cambia unos tipos que se dicen creadores de opinión y lo que tienen de ello es únicamente pertenecer a un medio u otro que ya dan el oso por cazado.

El debate sirvió, amigo bloguero, en mi criterio, para dar a conocer, por parte de Rubalcaba, del peligro potencial de políticas reaccionarias y antisociales que Rajoy tiene en la cabeza, que esboza tímidamente en su programa electoral y que se están realizando de hecho en las Comunidades Autónomas donde gobierna el PP.

Y también sirvió el debate para dar a conocer la manipulación, las torcidas maniobras y las asquerosas estrategias con la información, que utilizan los conservadores en el Gobierno, en la oposición y, por lo visto, también en la campaña electoral.

Pedro Villagrán 10.11.2011