SANIDAD PÜBLICA , SANIDAD PRIVADA

La Sanidad Pública y la Sanidad privada conviven en nuestro País haciendo de nuestro Sistema un modelo mas que interesante. Ese diseño de modelo quieren exportarlo a otros países y ello nos debería llenar de orgullo. No obstante hay situaciones, verdadamente excepcionales, que nos debería llevar a reflexionar esa convivencia.
El Estado es el último responsable de la Salud y de la asistencia sanitaria de sus ciudadanos. Ello es claro y evidente. Solo Él tiene la responsabilidad última del cuidado sanitario de sus ciudadanos. Y el Estado tiene la obligación clara de velar por las buenas praxis tanto en la Medicina Pública como en la Privada.
La medicina privada, y aqui no vale engañarnos, es una forma de entender la medicina dando un servicio mas que aceptable a sus usuarios pero siempre bajo el criterio crematístico de la rentabilidad económica. Diciéndolo claro: es un negocio y si no lo es se cierra. Duro pero así es. Pero en esa rentabilidad económica debe de haber un margen mas que amplio para evitar que los intereses crematísticos no lesione en lo mas mínimo una asistencia optima sanitaria.
Leía ayer que en una clínica privada de Madrid un paciente iba a ser intervenido de una afección oftalmológica. Ya en quirófano, con la via venosa abierta, la premedicación anestésica introducida y los campos quirúgicos puestos, se dieron cuenta que le faltaba un recibo de pago a la entidad aseguradora que se responsabilizaba del caso médico. 166,40 Euros, por lo visto. La decisión, como si de un kilo de habichuelas se tratara, fué retirar todo y sacarlo de quirófano para arreglar el asunto administrativo y, una vez resuelto, darle cita para otro día y sesolver el problema quirúrgico.
Como médico, como socialista y como ser humano me da repugnancia tal noticia. Es una auténtica vergúenza tal comportamiento de unos llamados profesinales que priorizan intereses económicos a el buen hacer en una profesión que demanda después un respeto y una consideración a sus conciudadanos.
El Estado, el Gobierno, debiera poner mas orden y mas firmeza en estos asuntos que deterioran y lesionan al Sistema sanitario español del que nos enorgullecemos merecidamente, aunque haya, excepcionalmente, casos como el relatado de Madrid.




Pedro Villagrán 22.10.09