Las medidas del Gobierno repercuten, y bastante , en los bolsillos de nuestra gente. El tocar a los funcionarios en sus retribuciones y el hacer una política de contención del gasto en las ensiones es, evidentemente, lesivo a los intereses de esos colectivos.Eso es de una evidencia clara.
Igualmente es evidente que esas medidas son necesarias. Pero no deberíamos olvidar que nuestra gente solicitan otras medidas para percibir claramente que todos pagamos la crisis y no solo los que no hemos tenido la culpa en el desarrollo de esta situación. Todo el mundo comprende la situación y solo Rajoy y cuatro gilip... más, estan en contra de las medidas. Pero eestas medidas deben venir acompañadas con actuaciones parelelas de imagen que, a lo mejor no son cuantitativamente fructíferas, pero cualitativamente, lo son. Lo son para defender medidas drásticas como las que se imponen y palian, en algo, lo perjudicial en la imagen de dichas medidas.
En mi anterior entrada hablaba de los coches oficiales. Yo nunca he comprendido porqué son de gran cilindrada, al igual que tampoco porqué todos los cargos públicos lo tienen. Si ya de por sí tienen uno suyo personal, no es de recibo, ni se entiende, porqué tienen otro "oficial". Aparte del chofer y de un escolta. ¿Que razón comprensiva puede haber para comprenderla desde cualquier óptica? Pero si es desde cualquier optica incomprensible imagínate, amigo bloguero, para un pensionista o funcionario de este país.
Se bién que alguien habrá que hable de populismo o de demagogia. Pero sería una medida maravillosa que los cargos medios de la Administración del Estado dejaran los gastos suntuarios, que no son pocos, para dar ejemplo al país de mesura y de contención del gasto y de la imagen ostentosa.
Pedro Villagrán 29.05.10
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