El asunto que en los últimos días ocupa la portada de muchos periódicos sobre la interpretación “sui géneris” que se hace del Régimen de Franco, salido de un golpe de Estado militar a un gobierno democrática y legalmente establecido, por parte de algunos llamados historiadores, llama la atención y nos repele a muchos que intentamos solo defender la Memoria de la honorabilidad de aquellos hombres y mujeres ultrajados hace ahora setenta y cinco años.
Que con dinero público se subvencione una patraña tal es un escándalo mayúsculo que a los hombres de bien no puede dejarlos sin opinión. El Ministro de Educación, con su habitual sosiego habla de lo privado y lo público, habla, como para que lo comprendamos, de la libertad de expresión y de juicios de intenciones. No estamos de acuerdo. Y de verdad que lo siento.
Por ejemplo en Alemania es imposible de ver que alguna persona ligada a la política haga pinitos de interpretación justificativa a lo acontecido en ese país en los prolegómenos de la II guerra mundial y en las actividades delictivas, criminales y repugnantes de la Alemania nazi. Todo aquello es fuertemente repudiado, frontalmente despreciado y totalmente destronado. Debería servirnos ese país, al igual que Suiza, donde ha vivido muchos años, para aprender a repudiar la nociva historia pasada, que nos hace de separación, al igual que nos enorgullecemos en común de otros episodios en tiempos pretéritos.
En nuestro país no se hizo una ruptura con el Régimen fascista del General Franco. Se hizo una transición, la mejor posible en aquellos momentos, y lo que estamos viendo ahora es, ni mas ni menos, secuelas de las grietas que quedaron abiertas en aquella negociación, utilizadas torticeramente por los herederos de los que estaban enfrente nuestra en aquella mesa de negociación.
Esperanza Oña es la alcaldesa de Fuengirola desde hace, creo, cuatro legislaturas. Bajo su liderazgo, con mayoría absoluta, el Consistorio fuengiroleño tiene el orgullo de ser el Ayuntamiento mas opaco de España. Total calamidad con la oposición, auténtica vocera de la intransigencia está igualmente en el Parlamento Andaluz donde repite en el mismo su lenguaje escandalosamente chillón y sectario. Ella tiene una página Web. En ella dice textualmente ”de hecho, la Guerra Civil española no es más que consecuencia de la rebeldía izquierdista ante unos resultados electorales adversos, Ahora no se encuentran en mejor disposición”. Así pues para esta líder del PP los culpables de la Guerra fueron las izquierdas. Es una auténtica vergüenza tal desatino, además de un desconocimiento mínimo de la historia reciente de nuestro país.
Deberíamos poner pies en pared para hacerles ver a estos añorantes de tiempos pasados que las cosas son como son, que la historia fue, a pesar de ser dolorosa, como fue, y que las mentiras y los embustes intencionados no van a hacer cambiar las cosas tal como sucedieron, por mucho que quieran ellos cambiar la Historia.
Pedro Villagrán 01.06.2011
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